jueves, 4 de septiembre de 2008

Hoy ha venido a visitarme de nuevo el fantasma de tu recuerdo, cuando esto sucede, me duele la cabeza, -quizá por el vértigo que me producen las millones de mariposas que comienzan a volar en mi interior- lloro con mucha facilidad, cualquier c0sa me sienta mal y hasta a veces me cuesta respirar.

El es como tu, bueno yo diria que hasta un poco mas transparente.

Antes se pasaba con mas frecuencia a saludarme y a hacerme recordar pero ahora parece que ya se esta cansando y como la menstruacion, se presenta una vez al mes y normalmente se queda varios dias.

Su unico objetivo, me ha comentado que es recordarle, osea ,recordarte, bueno recordaros, da igual sea lo que sea, viene a darme la murga, que si te acuerdas de tal, que si te acuerdas de cuando fuimos a nose donde, que si te acuerdas de aquel dia, vamos que a este paso no te olvido ni en mi lecho de muerte.

Como buen fantasma de recuerdos tuyos, me hace llorar, y el con esa cara de idiota -con tu cara de idiota- viene y me intenta abrazar, nunca desiste en su intento de hacerlo pero cuando me roza, multitud de imagenes recorren mi mente y lloro con mas intensidad, el intenta consolarme contandome chistes o historias graciosas sobre ti, osea sobre el, bueno lo que sea, pero solo quiere verme reir para luego poder hacerme llorar de nuevo.

Mira que lo he intentado, ignorandole, insultandole, buscando otra persona, tratando de olvidarte pero es imposible, he desistido y ahora me resigno a escucharle y aguantarle, el no lo sabe pero me esta haciendo cada vez mas fuerte y cuando te vuelva a ver y me de cuenta de que ya no te quiero ni te necesito desaparecerá, igual le eche de menos a el, pero será a el y no a ti y quizá en ese momento me aparezca un fantasma del fantasma de tus recuerdos, por lo menos el me dedicaba todo su tiempo.

Sara*

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Genial, pequeña saltamontes. Impresionante. Te has superado de aquí a la Meca pasando por Helsinki y vuelta por San Francisco. Progresión exponencial, la tuya. El fantasma del fantasma, el remate que ni el mejor delantero del mundo. Bravísimo.